China avanza en la eliminación del control total de la natalidad

El país se enfrenta a un rápido envejecimiento de la población tras cuatro décadas de restricciones sobre el número de hijos Aunque sea el país más poblado del mundo, el peligro que acecha al gigante asiático está en la caída de la natalidad y el envejecimiento. Algunos expertos aseguran que eso provocará el fin del milagro económico chino.

 El abismo demográfico al que se acerca tiene poco que ver con sus 1.400 millones de habitantes. El problema al que se va a tener que enfrentar no es de exceso, sino de escasez. Por que no nacen suficientes chinos. El año pasado se registraron 15,23 millones de nacimientos. Supone una reducción de dos millones sobre el dato del año anterior 

Las razones de que la natalidad haya caído por debajo de la tasa de reemplazo los 2,1 hijos por mujer que se consideran el mínimo para evitar que la población se reduzca son muy diferentes.

 El acceso de la mujer al mundo laboral y el desarrollo económico que ha desembocado la erradicación casi total de la pobreza y en la explosión de una vibrante clase media han provocado que el interés por convertirse en padres y madres haya caído en picado. Y, además, lo ha hecho de forma inversamente proporcional a la esperanza de vida, que en los últimos ocho años ha pasado de los 74,83 años a 76,5.

La Asociación China de la Seguridad Social estima que, en 2035, la población de más de 60 años pasará de los 240 millones actuales a 400 millones. Teniendo en cuenta que la población en edad de trabajar también es cada vez menor, la tasa de dependencia.

Samara Pradillo